Realizan por primera vez en México el Festival de las Guitarras

    • A cada acto hubo la incursión de la guitarra de Robbin dándole un toque de modernidad pero también de frescura y deleite para los sentidos de los presentes

México.- La noche de este sábado 2 de diciembre, las paredes de El Cantoral vibraron, pero de una manera especial y diferente.

Dando banderazo al inicio de los festejos de fin de año, el festival de las guitarras se realizó por primera vez en México ante un público que reflejaba la mezcla de generaciones atentos de disfrutar una gran velada.

El primero en aparece en el escenario fue Omán Kaminsky, que desde el momento que tomó asiento su gesto se transformó interpretando magistralmente el concierto del sur, con una maestría en cada acordé de su guitarra acompañado de la orquesta filarmónica metropolitana bajo la batuta de Fernando Saint Martín, hasta la última nota hizo que el público presente disfrutara.

Ya para el segundo acto salió Alejandro Córdova con su instrumento, vestido con un smoking comenzó a entonar las primeras notas de una de las obras más destacadas, el concierto de Aranjuez siendo tocado de una manera tan exquisita y sensible que hasta el final puso en pie a los asistentes.

Ya para el acto que culminaría la noche de otoño, hace si irrupción Robbin Blanco con su inseparable guitarra (una de las tres en el mundo existentes) y a la orden del director, se dio inicio al recitar de la hermosa obra de Antonio Vivaldi de las cuatro estaciones.

A cada acto hubo la incursión de la guitarra de Robbin dándole un toque de modernidad pero también de frescura y deleite para los sentidos de los presentes.

Ya concluido, el músico mexicano agradeció a los espectadores pero queriendo rematar con una pieza personalizada y dedicada a las tres mujeres más importantes en su vida (su madre, esposa e hija) concluyendo así una ocasión especial que unió sin lugar a dudas a las familias bajo algo que traspasa generaciones, la buena música.

Con información de SUN

Foto: Especial