Convidados de piedra

PALABRAS CLARAS

Silvano Bautista Ibarias

CONVIDADOS DE PIEDRA

Camarón que se duerme se lo lleva la corriente, reza un conocido refrán. Y eso es precisamente pareciera que es lo que está pasando con el Frente Amplio por México en la entidad que está llegando tarde al proceso electoral para la gubernatura. Mientras, tanto, el partido oficial y su candidato ya les lleva varios kilómetros de ventaja que difícilmente podrán remontar.

Mientras Morena tiene ya definido su candidato. El FAM apenas está en su proceso de inscripción de cada uno de los partidos, PRI, PAN y PRD para definir el mecanismo por medio del cual elegirán a su candidato o candidata. Van tarde, en resumidas cuentas. 

Han surgido nombres, en su mayoría de mujeres que aspiran a la candidatura a la gubernatura. Pero siendo realistas no tienen la estructura ni la capacidad de hacer frente al abanderado morenista que tiene en su haber más de seis años de campaña por toda la entidad. Somos respetuosos de los tiempos que marcan las instancias electorales, han mencionado los dirigentes de los partidos opositores, como si realmente eso contara, lo que pasa es que se han quedado dormidos.

Desde el inicio del actual sexenio morenista, PRI, PAN y PRD quedaron desfondados. No fueron capaces de accionar y poner en marcha mecanismos y estrategias que les permitieran generar y crear actores políticos que fuesen capaces una vez llegados los tiempos electorales de hacer frente a esa maquinaria gubernamental y oficial llamada Morena, que, si pone una vaca de candidato, esa vaca gana. Se perdieron en el limbo, se dejaron comer el mandado y en el pecado llevarán la penitencia.

Siendo honestos, ninguna de las damas que han levantado la mano para encabezar la gubernatura por el FAM está en capacidad de dar la batalla al llamado “jaguar negro” que logro imponerse en Morena. Eso lo saben perfectamente los líderes partidistas de oposición.

Con este breve contexto, la pregunta es ¿A qué van estos partidos a la elección de este año por la gubernatura? Serán testigos meramente presenciales o son invitados de piedra marginados, fuera de lugar o sin voz en este ambiente electoral.

Jaime Guerrero, analista político, indica que los partidos están partidos y algunos a punto de estar hechos añicos. Las organizaciones partidarias de la ahora oposición no tienen nada que ver con las de hace algunos años.

En 2010, por ejemplo, PAN, PRI y PRD lucían fuertes y saludables. A pesar de esta apariencia, la realidad es que el germen de su destrucción habitaba en ellos. La suma de sus errores, corruptelas y alejamiento de la sociedad ya habían alejado a vastos sectores sociales. 

Los que aún quedaban es porque percibían que podían sacar algún beneficio. Las nomenclaturas exprimieron a sus organizaciones hasta dejarlas en los huesos. Tomaron mucho (puestos, recursos, influencias) y dejaron muy poco.

El PRI se aferra a una vida que se le escapa; el PRD podría desaparecer en estas elecciones; incluso el PAN, el partido menos débil del FAM, no está en su mejor momento. Sus dirigencias han sido obligadas por las circunstancias a aceptar que grupos sociales les impongan condiciones, algo que no les gusta.

Ahora, estos maltrechos partidos tratarán de ganarle a la colosal maquinaria ilegal y corrupta de Morena, partido dirigido por el presidente