– Activistas denuncian uso de términos revictimizantes y falta de perspectiva de género en declaraciones oficiales –
Las declaraciones del fiscal Jorge Luis Llaven Abarca sobre el doble feminicidio ocurrido en San Juan Chamula encendieron la indignación de activistas feministas. Al anunciar la detención de Vicente “N”, presunto asesino de Rosa Valeria, de 18 años, y su hermana, el funcionario calificó el caso como un “crimen pasional”, lo que fue interpretado como un intento por justificar al agresor. “No fue un crimen pasional, fue un macho patriarcal”, respondió la periodista y activista Sandra de los Santos.
El fiscal sostuvo que las jóvenes conocían al agresor, que no fueron secuestradas y que subieron voluntariamente a su vehículo. También afirmó que Vicente tenía una relación sentimental con Rosa Valeria y que los celos fueron el motivo del ataque. “Está acreditado que ellas abordan el vehículo, y él las lleva al lugar donde las priva de la vida”, expresó.
De los Santos criticó con dureza este enfoque. Recordó que “crimen pasional” no es un término legal y señaló que usarlo encubre la violencia estructural. “Reducirlo a un arrebato es disfrazar el delito. Eso fomenta impunidad, porque pone el foco en las emociones del agresor y no en su responsabilidad”, afirmó. También advirtió que declaraciones como esta violan los compromisos del Estado en materia de género y pueden afectar el desarrollo de la investigación.
A su juicio, expresiones como las del Fiscal refuerzan el machismo institucional. “Que lo diga el Fiscal no es cosa menor; muestra cómo se sigue tolerando y normalizando la violencia desde el poder”, concluyó. (Foto: Especial)