Escenario criminal en Semana Santa

ESCENARIO CRIMINAL EN SEMANA SANTA 

Fernando Hinterholzer Diestel

México encabeza “los Top Ten”, donde nadie desearía estar, somos el mercado criminal, número uno en una lista de 190 países, que involucra el tráfico de drogas sintéticas, más de 182 mil homicidios y de 100 mil desaparecidos, en lo que va del actual sexenio de la 4T. Esto es una plaga en el tejido social del país, que posicionan a México en un sitio nada envidiable. El narcotráfico fue el punto de partida para que los carteles del crimen organizado diversificaran sus negocios de manera impune, la extorsión, el secuestro, el robo de vehículos, robo de hidrocarburos, la trata de personas y los fraudes financieros, en prácticamente todo el territorio, han ido ahogando la economía nacional y poniendo en riesgo las cadenas productivas y actividades económicas en todos sus niveles. Las estadísticas delictivas continúan creciendo exponencialmente, en algunos rubros hasta el terror absoluto. Y, la delincuencia criminal que, por supuesto no está ni acotada ni atacada, sino todo lo contrario: aunque algunos “comentocratas” discuten las cifras definitivas y las definiciones del término” control territorial y político”, la realidad es que el crimen organizado mantiene sometido a un alto porcentaje del territorio mexicano bajo el yugo de un llamado, “Estado paralelo”.

La Semana a semana santa que recién termino ayer, puso en evidencia el riesgo que enfrenta los cimientos del Estado mexicano. Las escenas de extorsiones en Guerrero son ejemplos sintomáticos de un narco-estado. Veracruz se revuelve en medio de una batalla entre carteles criminales. Chiapas se ha vuelto un infierno, por la disputa entre los de Jalisco y los hijos del chapo. Sinaloa donde no pasa nada, “según el imberbe e inepto vegete” que lo desgobierna, es enorme el vacío de autoridad, para que sucedan hechos criminales se sientan en libertad para secuestrar a decenas de personas, incluidos mujeres y niños. En Morelos, las bandas criminales subyugan a la población inerme por el desgobierno de un futbolista, “que tiene lo que yo tengo de físico nuclear”. Zacatecas arde por el desgobierno de un Monreal, de hecho, las 22 entidades bajo el gobierno de morena, son un caos, y el crimen organizado es el que manda.  Sin embargo,López Obrador y su “corcholata sucesora”, Claudia Sheinbaum minimizan el tamaño de la crisis desde hace unos meses.  El país sigue padeciendo los embates de la criminalidad, los cárteles de la droga han diversificado sus negocios ilícitos y los territorios en disputa siguen sufriendo. Reconocer los errores de un gobierno que ha fallado podría ser el punto de arranque para construir una ruta hacia una política de seguridad que funcione y proteja a los ciudadanos. Sin embargo, estos cínicos de la 4T, siguen negando su rotundo fracaso.

Esto lo realizan esparciendo sospechas en relación a las elecciones del 2 junio, y cuyo único propósito, es el de “contaminar” el discurso público para el día después de la elección, agrandando el margen del partido oficial para defender su triunfo en las urnas, o para pelear su probable derrota. López y sus “esbirros” de Palacio Nacional, intentan propagar desde ahora, “el famoso complot o golpe de estado técnico” en contra de su partido el día dos de junio, no importando cual fuera el resultado: si ganan, para fortalecer el golpe de poder en contra de las instituciones del país; y si pierden, “para incendiar el territorio nacional, buscando un escenario de desastre que les permita conservar el poder. Esta obsesión del tabasqueño, para que su sucesora continúe “su inexistente programa transformador del llamado segundo piso de la 4T”, el presidente “ha olvidado” la atención de aspectos esenciales de la vida nacional como es el aumento de la violencia, la falta de agua en muchas regiones del país, los desaparecidos entre otros temas críticos. Y, al no hacer nada al respecto, vuelve a engañar diciendo que sus yerros son mentiras de sus adversarios. 

La amenaza, pues, está más que evidente: ni el presidente ni sus “achichincles” más cercanos van a permitir que las elecciones se realicen con normalidad. Por el contrario, están tratando de destruir la credibilidad del proceso para lucrar con el resultado, sea cual fuere: si ganan, para transformar su triunfo en una “guerra” contra los “enemigos del pueblo”, a manera de “defender las conquistas del movimiento”; si pierden, para llamar a movilizaciones contra esos enemigos, impidiendo así que la nueva legislatura se instale, y negándose a entregar la presidencia de la república. La sociedad civil y todas y todos los mexicanos, tenemos el enorme propósito este año, de volver competitiva a la opción opositora, y al mismo tiempo de preservar la normalidad democrática que permita tres cosas: “la realización de elecciones auténticas en la mayor parte del territorio nacional; la aceptación de su resultado por parte de suficientes grupos y actores; y la alternancia efectiva en los poderes legislativo y ejecutivo, en un marco institucional”. Hoy México se peligra bajo amenaza, bajo el mismo escenario que ya ha destruido a dos países latinoamericanos y ha dejado malheridos a varios más. 

Decididos a conservar el poder por muchos años más, la propaganda sistemática para que sus seguidores se preparen para defender lo que ellos consideran el triunfo inevitable de Morena en las próximas elecciones es un muy peligroso desafío. Ya que, no han valorado el estado emotivo de los votantes que cada día ven más claramente dos planes de gobierno totalmente diferentes en visión, esencia, forma y fondo; continuidad o cambio. La valoración del conflicto social en ciernes está menospreciada, por lo tanto, el presidente “enloquecido” genera diariamente la polarización que ya ha propiciado un ambiente enrarecido y de niveles de tensión y violencia insólitos. “El olor a muerte” que recorre el país, debido por la exponencial violencia generada por el rotundo fracaso en materia de seguridad pulula en muchas entidades mientras, cínicamente tratan de endosar la responsabilidad del desastre a los gobiernos anteriores. De continuar el presidente a escasas 9 semanas de las elecciones con sus técnicas de demonización de grupos opositores y la creación de un enemigo común para mantener la cohesión dentro de Morena y desviar la atención de la violencia del cogobierno con el narco, se puede entrar en un escenario inmanejable para “ellos y nosotros”.

ES CUANTO

ADENDDUM: transcurrido un año del incendio en la estancia del Instituto Nacional de Migración (INM) en Cd. Juárez, las causas de la conflagración han quedado aclaradas, fueron la irresponsabilidad, negligencia, omisión y leyes obsoletas que llevaron a la muerte de 40 personas y 25 heridos. Sin embargo, no ha habido cambios sobre el trato legal y humanitario que debe dársele a los miles de migrantes que siguen llegando a la frontera. Pero siguen omitiendo el castigo al Sr. Garduño comisionado del INAMI y otros jefes por la omisión en la muerte de los migrantes, no cabe duda que estos morenistas, son de la peor ralea que existen, pura impunidad y protección a los criminales de la 4T. Y mientras tanto, en Chiapas a pesar de los cientos de revisiones migratorias, los carteles de traficantes de personas continúan enviando a cientos de migrantes a la frontera norte, sin que nadie se los impida. El cartel de los Chamulas es uno de los más activos en ese “gran negocio”, y la FGR, el Ejercito o la Marina y la GN, pues bien, gracias embolsándose millones de pesos que les pagan, por hacerse “de la vista gorda”.