Bloqueos carreteros, negocio redondo

PALABRAS CLARAS

Silvano Bautista Ibarias

BLOQUEOS CARRETEROS, NEGOCIO REDONDO

En la más completa impunidad, en los últimos meses los bloqueos carreteros, así como la toma de casetas de cobro, se han convertido en un auténtico negocio para ciertas organizaciones sociales y estudiantiles como los delincuentes de la escuela normal rural Mactumactzá, ante la inoperancia de las autoridades de los tres niveles de gobierno que permanecen sin tomar cartas en el asunto.

Muestra de ello, es que, desde hace varios meses, en municipios de la región Altos, se han suscitado infinidad bloqueos carreteros que son casi de manera permanente, por no decir que diarios, lo que ha dado al traste con la economía de varios municipios

Quienes bloquean estas vías de comunicación fijan las cuotas a pagar para transitar, y cuando así les place cierran el paso vehicular por completo, aun cuando los automovilistas se digan dispuestos a pagar la cuota.

Por ello, está latente, el desalojo de personas que mantienen bloqueos en estos puntos y que cobran cuotas excesivas para poder circular en esa parte de la geografía chiapaneca. En estos puntos carreteros, las cuotas son de entre 100 y 200 pesos.

Hasta el momento, se desconoce si exista alguna orden superior de desalojar la zona y asegurar se mantenga el orden a fin de restablecer la paz social y la tranquilidad de los habitantes.

El kilómetro 46 prácticamente ya en San Cristóbal de las Casas, es el punto de mayor referencia donde casi a diario se registra un bloqueo por parte de diferentes organizaciones, ya sean magisteriales, campesinas, entre otras y las cuales operan en la más completa impunidad sin qué autoridad alguna los desalojen.

Oxchuc, es otra referencia en donde en el punto denominado “El Arco” a diario se registran bloqueos y los automovilistas tienen que desembolsar entre 100 y 200 pesos para poder circular y llegar a sus destinos como Ocosingo y Palenque.

Rancho Nuevo, Teopisca, la carretera que conduce Venustiano Carranza son también otros escenarios donde de manera constante se registran los carreteros.

CASETAS, NEGOCIO REDONDO

Otro modus vivendi que han hecho ciertos grupos de ciudadanos y organizaciones sociales es la toma de las casetas de cobro de algunas carreteras. La que más sufre las consecuencias es la de Tuxtla–San Cristóbal de las Casas, la cual es constantemente tomada por asalto por estudiantes normalistas que aplican cuotas que van desde los 30 hasta los 100 pesos, según el estado de ánimo de estos.

Cada vez son más constantes las denuncias de turistas, tanto nacionales como extranjeros, que son retenidos en estos puntos de bloqueos carreteros y obtienen su liberación previo desembolso de múltiples cantidades que seguramente son pagadas por las propias autoridades.

Ello sin contar la mala imagen que se genera de la entidad a nivel nacional e internacional. Si a esto se agrega el descontrol que prevalece en la región fronteriza por las acciones del crimen organizado, esto se vuelve un auténtico caos.