– Son al menos 300 extranjeros que pasarán la noche en Ocozocoautla para después continuar con dirección a Cintalapa –
Al menos 300 migrantes –en su mayoría venezolanos– partieron en caravana del municipio de Tuxtla Gutiérrez hacia Ocozocoautla, Chiapas, donde pernoctarán para continuar mañana su camino hacia los Estados Unidos.
A diferencia de hace dos días, este viernes no encontraron resistencia por parte de agentes migratorios, pues el miércoles pasado, al intentar salir de la capital del estado, los uniformados montaron un cerco para evitar su paso, pero esto no los detuvo.
La segunda caravana en menos de una semana partió a las 7:00 horas y logró pasar libremente el punto de revisión que mantiene el Instituto Nacional de Migración (INM) en la salida poniente de la ciudad.
“¡Sí se puede, ¡sí se puede!”, gritaron los migrantes también procedentes de países como Cuba y Haití al pasar este punto.
Su trayecto por la carretera estuvo acompañado por la Guardia Nacional, después por la Policía Estatal y a su llegada a Ocozocoautla fueron escoltados por elementos de Protección Civil, de Tránsito y de la Policía Municipal. Ahí, algunos ciudadanos les dieron comida y el personal del Ayuntamiento les otorgó botellas con agua.
Entre este contingente que ondea banderas de Venezuela viajan bebés y niños que, protegidos por sus familiares, pasaron “el crucero de la muerte”, como popularmente ya se conoce al Crucero Los Pinos, en la vía Ocozocoautla-Tuxtla, por los niveles de accidentes y delitos registrados.
Los migrantes señalaron que sólo en caravana han podido avanzar, al acusar que pese a su voluntad para regularizarse, los trámites para su libre tránsito por el país están detenidos en Chiapas.
Al considerar que al caer la tarde el camino es peligroso, pasarán la noche en Ocozocoautla para después continuar con dirección al municipio de Cintalapa. (Fuente: Reforma. Foto: Daniel Díaz/Agencia Reforma)