– A pesar de la aparente tranquilidad en algunas zonas, la violencia está destruyendo vidas humanas y se ha adueñado de los territorios, afirma Monseñor Rodrigo Aguilar Martínez –
Durante la conferencia dominical, Monseñor Rodrigo Aguilar Martínez, obispo de San Cristóbal y administrador apostólico de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, expresó su preocupación al señalar que la violencia ha arraigado en los territorios de Chiapas.
Haciendo referencia a los eventos del pasado fin de semana en Berriozábal y Tuxtla Gutiérrez, el líder religioso resaltó que estos son signos de que la violencia está muy próxima.
El obispo mencionó que, a pesar de la aparente tranquilidad en algunos lugares, la violencia está destruyendo vidas humanas y se ha adueñado de los territorios. En específico, destacó que la situación en Tuxtla Gutiérrez ha cambiado, y Berriozábal, que solía parecer tranquilo, ahora también se ve afectado por actos violentos.
Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de una plática para promover la paz en Chiapas, similar a la que ocurrió en Guerrero entre el crimen organizado y los obispos católicos, Aguilar Martínez consideró que sería difícil.
El obispo subrayó la importancia de no responder a la violencia con más violencia y exhortó a quienes cometen actos violentos a reflexionar sobre la necesidad de construir la paz basada en la verdad y la justicia.
En el contexto de la Cuaresma, Monseñor Aguilar Martínez recordó el llamado de los obispos de México a los fieles para que sean conscientes de los grandes retos que enfrenta el país, incluyendo la violencia, la pobreza, las desigualdades, la corrupción y la impunidad. (Con información de Ultimátum. Foto: Canal 13 México)