México, EEUU y el fentanilo

MÉXICO, EEUU Y EL FENTANILO

Fernando Hinterholzer Diestel

La seguridad interior en Estados Unidos de Norteamérica (EU), pasa por tiempos complicados, amén de enfrentar los retos a su hegemonía económica mundial frente a China, su seguridad interior afronta fuertes desafíos. Un par de ellos, le brindan a México un papel preponderante, visto como un aliado o como un obstáculo para EU, de cara a las elecciones en ese país. Como no sucedía en muchas décadas, la cooperación mexicana resulta decisiva para que EU pueda hacer frente y con mayor eficiencia un par de amenazas que le están provocando muy serios desafíos a su sociedad. En primer lugar, detener las muertes por sobredosis de fentanilo y, en segundo lugar, evitar la llegada de miles de inmigrantes a su frontera sur, como está previsto, con los 150 mil nuevos migrantes que están por llegar a Tapachula. Y esto generara en problema mayúsculo para el gobierno, y en el corto y mediano plazos. La colaboración de México en estos dos temas resulta fundamental, en el tema de migración, los gobiernos anteriores a Biden lograron una “forzosa cooperación de México” por medio de diversos tipos de amenazas, y el país logro en parte la limitación de migrantes por medio de una estrategia exhaustiva de detenciones.

Derivado del incremento exponencial de fallecimientos por sobredosis de Fentanilo, EU sea ha vuelto sumamente vulnerable por diversas razones. Primero, porque se trata de una droga letal que, aunque en pequeñas dosis, genera daños terribles. Segundo, en China donde se producen las materias primas para fabricar Fentanilo no aceptan cooperar con EU en su lucha contra el letal opioide, ya que les genera muchos millones de dólares, por la venta de precursores a “los carteles mexicanos que producen la letal droga”. Tercero, nuestro país pasa por una severa crisis de violencia criminal, lo que lo convierte en socio poco confiable para combatir a los dos cárteles (CJNG y el de Sinaloa) que exportan casi todo el fentanilo que se consume en la Unión Americana. En las entidades federativas del país, los carteles criminales avanzan rápidamente controlando más y más territorios, afianzado su poder cada vez.  Y el gobierno mexicano ha demostrado su incapacidad (y voluntad) para combatir al crimen organizado, derivado en una complicidad corrupta de las altas esferas policiacas y militares. De hecho, se ha comprobado que no se logra controlar la violencia ni con Guardia Nacional ni con el Ejército, y seguramente necesitaremos el apoyo de Estados Unidos para avanzar en la lucha contra el crimen.

 Al colaborar activamente con Estados Unidos en el combate al fentanilo, México aprovecharía la dinámica, pues, al tiempo que apoyaría a un aliado clave en un momento difícil, se encontraría eventualmente (a través de esa misma colaboración) en una mucho mejor situación para generar las capacidades que necesita y trazar una ruta exitosa, en p crisis domestica de violencia criminal. La extradición exprés de Ovidio Guzmán el pasado 15 de septiembre, fue una muestra palpable de la voluntad política del gobierno mexicano, “por tener contento a los gringos”, y que seguramente a cambio recibirá “su recompensa”. Fentanilo y migración son los dos temas más frágiles del presidente Biden en su carrera por la reelección. La extradición de Ovidio provocó indudablemente, un cambio en las declaraciones públicas del Departamento de Estado hacia la cooperacion de México en la lucha contra las drogas.

Aunque todavía falta extraditar al capo de capos Caro Quintero, y capturar los hermanos de Ovidio, considerados como objetivos prioritarios, ya que son los principales productores del Fentanilo en el mundo, superando a los chinos e hindús.  Las constantes visitas a nuestro país de funcionarios norteamericanos de alto nivel vinculados a las diversas agencias de seguridad de los Estados Unidos evidencian la relevancia y preocupación de su gobierno por la situación que se vive en México. Los millones de consumidores en suelo estadounidense, han vuelto al fentanilo un negocio muy lucrativo para los grupos del crimen organizado, quienes lo producen y transportan fácilmente. Desde 2019, los cárteles mexicanos se han convertido en uno de los principales proveedores de este opiáceo a Estados Unidos, desplazando a China quien por muchos años fue su principal abastecedor

De acuerdo a información periodística, de los principales diarios mexicano (Universal, Excélsior y Milenio), “el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS por sus siglas en inglés) “expandirá agresivamente” la presencia de sus agentes de investigación criminal transnacional en México en 2024 para impedir que en suelo mexicano se fabrique fentanilo, se envíe al mercado estadounidense y se complete una red mafiosa que empieza en China con el contrabando de precursores químicos a América y obtiene ganancias multimillonarias. El anuncio fue hecho ayer por el Departamento de Estado de EU al difundir la “Estrategia para Combatir los Opioides Ilícitos”, elaborada por la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI por sus siglas en inglés) del DHS”.  ES CUANTO

ADENDDUM: Engañoso e ideológico, el mensaje que se envía a la población por parte del Ejecutivo y Sedena, por decir lo menos, por qué si tenemos armamento, vehículos, tropas adiestradas y equipadas, naves anfibias, marítimas y aéreas, todo ellos presumido en el desfile del 16 de septiembre, con todo y rusos. Porque los carteles criminales son capaces de paralizar y prácticamente “tomar” durante horas ciudades enteras, sometiéndolas al terror y el miedo, y amedrentar poblaciones.