– El reptil capturado no era venenoso, pero generó pánico en colonia Renovación de Tuxtla Gutiérrez –
Para una familia en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, un día normal se convirtió en una gran sorpresa cuando un sonido proveniente de una caja de juguetes llamó su atención. Al abrirla, encontraron una serpiente que se asemejaba a una coral.
De acuerdo con Azteca Noticias, la serpiente estaba enrollada entre los juguetes del miembro más pequeño de la familia. Inmediatamente, se alertó a los servicios de emergencia por la presencia de una víbora peligrosa en su domicilio ubicado en la colonia Renovación, en la capital chiapaneca.
Elementos de Protección Civil respondieron rápidamente y, tras una inspección, identificaron que no se trataba de una serpiente coral, sino de un reptil con un parecido similar. El falso coral medía aproximadamente un metro de longitud.
El reptil fue capturado y entregado a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) para inspeccionar su condición y proceder a su liberación en su hábitat natural.
Autoridades estatales informaron que durante el mes de junio se han capturado más de 12 reptiles en Chiapas, incluidos boas, falsos corales, chicoteras y culebras. Esto se debe a que los animales buscan calor en zonas oscuras, especialmente en esta temporada donde las lluvias los arrastran de su hábitat.
Los coralillos son una de las especies más venenosas del mundo, con una longitud que varía entre 40 centímetros y más de un metro. Tienen una cabeza ovalada, pequeños ojos negros, escamas lisas y una cola corta. Su característica principal es su patrón de colores: rayas que intercalan el negro, el rojo y el blanco, utilizadas para atraer o protegerse de los depredadores.
Debido a su alta toxicidad, la mordedura de una coral puede poner en riesgo la vida de una persona, paralizando el sistema nervioso si no se recibe tratamiento inmediato. (Foto: Azteca Noticias)