Falso “obradorismo verdadero”

Í N D I C E

Ruperto Portela Alvarado

CARLOS MORALES, OPORTUNISTA FARSANTE

“Ladrón cree que todos son de su condición” y por eso mandan a sus esbirros troles, a señalar a los periodistas de chayoteros y extorsionadores. Por eso CARLOS ORZOÉ MORALES VÁZQUEZ se quiere comparar con gente verdaderamente honesta y no como él que es señalado de corrupto y “enriquecimiento explicable”, porque todos saben que ha hecho fortuna mediante negocios sucios.

Ahora, el farsante alcalde de Tuxtla Gutiérrez con licencia temporal ficticia, se muestra como un “obradorista verdadero”, cuando sabemos cómo ha conseguido puestos y cargos bajo la premisa de genuflexión y arrodillamiento, tal lo demostró sirviendo de testaferro al Gobernador JULIO CÉSAR RUIZ FERRO para destituir al entonces alcalde JULIO CÉSAR GARCÍA CÁCERES, “El Chimbo”, siendo diputado local con las siglas del PRI.

Después de ser Coordinador del Movimiento Territorial del PRI, CARLOS MORALES se pasó al PRD y siendo Presidente Municipal del partido del Sol Azteca, se prestó para acarrear gente a una concentración y acto del entonces candidato del tricolor a la Presidencia de la República, ENRIQUE PEÑA NIETO, que se celebraba en el estadio Víctor Manuel Reyna, donde también hacía campaña a gobernador con las siglas del PRI-PVEM, su posterior patrón MANUEL VELASCO COELLO, quien le dio trabajo como Secretario del Medio Ambiente e Historia Natural en el gobierno verde imberbe.

CARLOS MORALES, “El Modosito Morrallas”, inventó la farsa del “Obradorismo Verdadero”, después de servir y servil al más nefasto, corrupto y saqueador de las arcas públicas chiapanecas, MANUEL VELASCO COELLO, “Jefe del Cártel de la Cuija Verde”. Inclusive, en su ambición por seguir en la “mamazón política”, traicionó a su mismo hermano, PLÁCIDO HUMBERTO MORALES VÁZQUEZ, quien aspiraba a la gubernatura y anduvo más de dos años en campaña abierta para ocupar la hoy “Silla Morena”.

Pero CARLOS, “El Modosito Morrallas” ha estado acusado de “Violencia Política de Género”, por lo que el Instituto Electoral y Participación Ciudadana (IEPC) lo sentenció por eso a pagar una multa de casi 400 mil pesos e inscribirlo en la lista nacional de violentadores de género. Algo sucedió y se supone, que por intermediación de su hermano, entonces Magistrado Presidente del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, PLÁCIDO HUMBERTO MORALES VÁZQUEZ, intervino para exonerarlo de toda culpa.

El mismo alcalde de Tuxtla Gutiérrez con licencia, fue acusado por el delito de corrupción ante el Congreso y la Auditoria Superior del Estado en la compra de 3 mil 834 contenedores de basura por la cantidad de 28 millones de pesos a la empresa PROACTIVA-VEOLIA, con quien tiene un negocio de diezmo millonario a través del contrato para la recolección de basura en la ciudad.

Por eso lo acusó también el entonces diputado local, SALVADOR CAMACHO VELASCO, pero fue protegido por la diputada presidenta de la Comisión de Vigilancia de la LXVII Legislatura, ANA LAURA ROMERO BASURTO y de paso también el Auditor Superior del Estado, JOSÉ URIEL ESTRADA MARTÍNEZ, quienes se confabularon para dar protección e impunidad total a CARLOS MORALES. Y ese es el que aspira a ser candidato a la gubernatura de Chiapas.

Cinco años de ejercicio municipal como Alcalde de Tuxtla Gutiérrez, le resultó su “minita de oro” a CARLOS ORZOÉ MORALES VÁZQUEZ y su gavilla de serviles, en la que se incluye al Secretario de Seguridad Pública, JORGE ALEXIS ZUARTH CÓRDOVA; el Director de Tránsito, OSCAR GRACIANO MARTÍNEZ GRIS; el Tesorero Municipal, CARLOS AGUSTÍN GORROSINO HERNÁNDEZ y su testaferro de siempre, ALEXIS SÁNCHEZ SANTIAGO, quien se desempeña como Director de Comunicación Social y Relaciones Públicas con 90% de lealtad y 10% de capacidad para ejercer el cargo. Eso también es corrupción.

La historia de este sujeto originario de Ocozocoautla de Espinosa y perdedor de la elección por esa alcaldía, es larga y nefasta. Se ha hecho millonario con el saqueo a diversos rubros de la administración de la Presidencia de Tuxtla Gutiérrez como lo es el Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (SMAPA), que resulta su caja chica.

Igual se puede sospechar del robo de las cuotas que pagan más de 4 mil vendedores ambulantes que tienen de rehén a los habitantes de la capital; así como el cobro de 4 pesos de los servicios sanitarios de once mercados municipales y de ñapa, los ingresos por la entrada y rentas de cuartos en la Zona Galáctica.

A CARLOS MORALES VÁZQUEZ “le cayó como anillo al dedo” la Alcaldía de Tuxtla Gutiérrez después de haberla perdido en dos elecciones, igual como perdió la de su natal Ocozocoautla. También “le cayó de perlas” las entradas por los giros negros de bares, cantinas y piqueras, inclusive las que operan clandestinamente que son las más redituables y motivo de corrupción.

Igual se tiene que investigar el destino de los dineros que se obtienen por el pago del Impuesto Predial al que por segunda ocasión propone un aumento desconsiderado de 325% para este año 2023 y el 2024, con lo que pretende hacer su cochinito y está pagando el costo de su millonaria campaña de aspirante a la candidatura por el Gobierno de Chiapas.

Por supuesto y es seguro que el Congreso del Estado no apruebe las aberraciones de altos impuestos promovido por el edil CARLOS MORALES y pandilla de regidores aduladores, como no pasó también aquella intentona de cobrar el 2% al consumo de energía eléctrica que proporciona y cobra Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el 2% de impuesto a los servicios de hoteles y moteles de la ciudad capital.

¿Con esto basta?, porque “aún hay más”, dijera el célebre RAÚL VELASCO

Se acabó el mecate… Y ES TODO…