• Los vehículos que ingresan en Manhattan al sur del famoso Central Park pagan un peaje diurno medio de 9 dólares
Estados Unidos.- La administración de Donald Trump anunció el fin del peaje para los vehículos que entran a Manhattan, el primero de este tipo en Estados Unidos, destinado a reducir el tráfico y mejorar los transportes públicos, aunque las autoridades demócratas del estado de Nueva York aseguraron que “no darán marcha atrás”.
“El plan de peaje del estado de Nueva York contra el tráfico es una bofetada a los estadounidenses de clase trabajadora y a los propietarios de pequeñas empresas”, escribió el secretario de Transportes, Sean Duffy, en una carta dirigida a la gobernadora Kathy Hochul, que autorizó la introducción del impopular peaje, vigente desde el 5 de enero.
Los vehículos que ingresan en Manhattan al sur del famoso Central Park pagan un peaje diurno medio de 9 dólares, muy inferior a los 15 dólares que preveía el plan inicial suspendido por la gobernadora y que iba a entrar en vigor en junio pasado.
“Vamos a luchar. No daremos marcha atrás, ni ahora ni después”, dijo la gobernadora Kathy Hochul en una conferencia de prensa junto al presidente de la Autoridad Metropolitana de Tránsito (MTA) Janno Lieber.
“Este es un ataque de Washington a nuestra identidad soberana, a nuestra independencia”, espetó la gobernadora demócrata.
La MTA ha anunciado que ha recurrido la medida ante la justicia para garantizar que el programa “continuará a pesar de este esfuerzo sin fundamento para arrebatar los beneficios de los millones de usuarios del transporte público, peatones y, sobre todo, los conductores que vienen al distrito central de negocios de Manhattan”.
Para Lieber, resulta “desconcertante” que las autoridades federales “pretendan dar marcha atrás totalmente” a este proyecto de “gran éxito que ya ha reducido drásticamente la congestión”.
Con un tráfico infernal, Nueva York se había convertido en la primera gran ciudad de un país donde el coche es el rey, en adoptar medidas para disminuir el tráfico y fomentar el transporte público siguiendo el camino emprendido por Londres, Estocolmo o Singapur.
Con información de 24 Horas
Foto: Especial