– El caso, presuntamente relacionado con el crimen organizado, ya fue atraído por la fiscalía federal –
Unas 2 mil personas se congregaron para dar el último adiós al sacerdote y defensor de derechos humanos Marcelo Pérez Pérez, exigiendo justicia por su asesinato.
El caso, que ha conmocionado a la población de San Andrés Larráinzar, ya cuenta con un detenido y ha sido atraído por la Fiscalía General de la República debido a su presunta vinculación con el crimen organizado, dio a conocer la agencia AP.
La Fiscalía de Chiapas informó que el arresto del presunto autor material del homicidio, ocurrido el domingo, fue posible gracias al análisis de cámaras de seguridad, labores de inteligencia y declaraciones de testigos. Sin embargo, la Iglesia Católica insistió en que no basta con detener a los responsables materiales, sino que se debe capturar también a los autores intelectuales y actuar con firmeza contra los grupos armados que operan con impunidad en la región.
El obispo emérito Raúl Vera, conocido por su activismo, presidió la misa previa al entierro de Marcelo Pérez. En su homilía, llamó a combatir los abusos de los poderes políticos y económicos, denunciando a aquellos que “pagan asesinos para acallar voces” como la del padre Marcelo, quien era un defensor de los derechos de los pueblos indígenas.
La multitudinaria ceremonia tuvo lugar en el pueblo natal del sacerdote, donde los presentes coreaban “¡Justicia para Marcelo!” y celebraban su vida y legado como un líder que luchó por la paz en Chiapas.
Simultáneamente, se llevaron a cabo ceremonias paralelas en localidades fronterizas como Comalapa y Chicomuselo, donde la población vive bajo la amenaza constante del crimen organizado. Debido a la difícil situación de seguridad en esas zonas, muchos no pudieron trasladarse para unirse a los homenajes en San Andrés Larráinzar, pero expresaron su solidaridad desde la distancia. (Foto: AP)