• El cuadro chiapaneco da la campanada y elimina al líder nacional Muxes con un contundente 0-3 en la Ciudad de México
En una tarde inolvidable para el club y su afición, Estudiantes sacó la casta, demostró su jerarquía y venció con autoridad al líder general Muxes, en su propia casa, con un marcador contundente de 0-3, sellando así su pase a las semifinales de la Liga TDP y quedando a un paso del tan anhelado ascenso.
El primer tiempo fue una batalla táctica. Muxes, alentado por su gente, tomó la iniciativa en los primeros minutos y estuvo cerca de abrir el marcador, pero la falta de contundencia en los últimos metros y una defensa férrea de Estudiantes mantuvieron el empate sin goles hasta el descanso. Fue una mitad donde el oficio y el orden defensivo de los visitantes fueron clave para frenar al equipo más regular de la temporada.

La historia cambió en el complemento. Estudiantes salió con hambre, con garra, y con la determinación de hacer historia. El muro de Muxes, que se había mantenido firme durante más de 168 minutos entre ambos partidos, finalmente cayó. César López firmó una jugada magistral dentro del área y la culminó con un zurdazo ajustado al poste, imposible para el guardameta local. Era el 0-1 y el inicio de una pesadilla para los capitalinos.
Apenas se estaban acomodando tras el primer golpe, cuando al minuto 35, el goleador Daniel Cruz apareció para poner el segundo con una definición letal. Y como si fuera poco, dos minutos después, al 37, Edgar Ballinas empujó el balón a la red tras un gran centro de Cruz, silenciando por completo el estadio y sellando la histórica victoria.

Muxes tuvo una última oportunidad para meterse al partido desde los once pasos, pero el penal fue desperdiciado, sellando una noche para el olvido para el líder general.
Estudiantes celebra con justicia una victoria que no solo representa un boleto a semifinales, sino también un paso gigantesco hacia el ascenso. Por primera vez en su historia, el club pisa esta instancia en la Liga TDP, con la ilusión intacta y el sueño más vivo que nunca.