CON SU GUITARRA, CASTRO ORTIGOZA INTERPRETA LA MÚSICA DEL MUNDO
Manuel Zepeda Ramos
Bernardo Bertolucci. El cineasta italiano, último de los grandes creadores del realismo, inicia su larga, larga película, Novecento, que narra con gran inteligencia la historia del partido comunista de su tierra; inicia el filme, digo, con una escena emblemática: un cantante de ópera borracho, casi alcoholizado, todavía con vestuario como si acabara de salir de la escena, embriagado de dolor, recorre las calles de un pueblo de Italia, gritándole a quien le quiera oír: ¡Murió Verdi…murió Verdi!
El cineasta marca así el principio de su gran filme, 1900, «reclamando» a los habitantes de la Tierra la desaparición del inmortal Giuseppe Verdi en 1901, señalando así, con enorme talento, el principio del siglo que él abordaría en su gran película, el sello necesario de los grandes artistas.
Viene a mi memoria esta escena inolvidable porque ayer, jueves 19 de diciembre, Gustavo Castro Ortigoza interpretó en la capital de Veracruz, con su gran talento guitarrístico, sin duda, al gran compositor y arreglista español, el inmortal Francisco Tárrega, su «Fantasía sobre motivos de La Traviata», una de las óperas emblemáticas de Giuseppe Verdi.
Antes, este gran guitarrista para fortuna nuestra -también intérprete de instrumentos históricos-, que inició sus estudios guitarrísticos en la facultad de música de la Universidad Veracruzana y posgrado -Maestría y Doctorado en Música-, en la University of Southern California (USC), en los Ángeles, egresando con honores y especializándose en interpretación de guitarra e instrumentos históricos, dirección orquestal, análisis musical e industria de la música, ya había tocado, decía, a Fernando Sor (1778-1839), compositor español que sufriera exilio en París por motivos políticos, su Gran Solo, Opus 14, enseñando las virtudes de este gran compositor europeo.
El doctor Gustavo Castro Ortigoza ha sido solista de la orquesta sinfónica de Oaxaca, la orquesta de Cámara de Xalapa, la Mid-Kansas Symphony Orchestra; la USC Miller Symphony Orchestra, la Camerata Barroca Veracruz Chanterelle Baroque, entre otras. Ha sido dirigido por William LaRue Jones, Maxim Esquenazy, Tiong-Kiat Yeo, Eliseo Martínez y Javier García Vigil. Ha grabado música para la Universidad Veracruzana, FLORA Records, ULLANTA Music Works y SMARTMUSIC. El doctor Gustavo Castro Ortigoza se ha presentado en México, Argentina, Costa Rica, Cuba, España, Canadá y los Estados Unidos. Obtuvo el primer lugar en el 2004 Donald Miller Guitar Concerto Competition en Los Ángeles, California, así como en el 2003 MID-América Ensemble Guitar competition, en Chicago; obtuvo el tercer lugar en el Concurso Nacional de Intérpretes de Guitarra en Paracho, Michoacán y el cuarto lugar en el 2004 Fresno International Gitar competition.
Sigamos con el concierto del Doctor Castro Ortigoza:
De Agustín Barrios Mangoré, compositor paraguayo (1885-1944), Castro Ortigoza presentó al público presente en la sala el vals Opus 8 No. 4, en donde, en solo 5 minutos pudimos apreciar la enorme profundidad y gran talento de este compositor sudamericano, en su homenaje a la creación europea de todos los tiempos.
Gustavo Castro nos hizo a los allí presentes un regalo inolvidable: Interpretó la obra de nuestro gran compositor mexicano, Manuel M. Ponce: Sonatina Meridional, en tres tiempos, gran obra del Maestro Ponce que ha dado a México y a los mexicanos gran prestigio internacional en la gran saga mundial.
Se acercaba ya el final.
Del compositor brasileño, Sergio Assad (1952-), nos ofreció su Valseana (de Aquarelle), en donde pudimos apreciar el gran talento musical que hay en Brasil, en muchos años de gran creatividad musical.
Llegó el final:
Del compositor argentino de tangos, Ángel Villoldo (1861-1919), el Doctor Gustavo Castro Ortigoza nos ofreció El Choclo, tango universal conocido por todos e interpretado con gran maestría por el gran guitarrista, en un arreglo de Roland Dyens.
El aplauso, muy cálido del respetable, no se hizo esperar. Tan fuerte que la petición de un ancore, tampoco, a lo que Gustavo Castro accedió con gusto:
Nos despidió con una obra de Villalobos: uno de los preludios del gran compositor brasileño.
Fue un gran concierto que el virtuosismo guitarrístico de este talentoso intérprete, el Doctor Gustavo Castro Ortigoza, maestro de futuros intérpretes y también director del Ensamble de Música Antigua de Xalapa en la Universidad Veracruzana, puso al alcance del público de la capital veracruzana la gran música que se ha hecho en el Planeta.
¡Feliz Navidad!