• Cinco personas resultaron heridas tras un tiroteo en una escuela de Örebro, al oeste de Estocolmo; policía mantiene operativo
Suecia.- Alrededor de 10 personas murieron el martes en un tiroteo en un centro educativo de Suecia, incluido el presunto autor de los disparos, en el ataque escolar más mortífero de la historia del país escandinavo.
Las autoridades habían dicho inicialmente que varias personas habían resultado heridas en el Campus Risbergska, un centro de enseñanza secundaria para jóvenes adultos en la ciudad de Orebro, pero no habían informado de ninguna víctima mortal.
Los atentados en centros escolares son relativamente raros en Suecia, pero el país ha sufrido tiroteos y atentados con bomba relacionados con la violencia de bandas que matan a decenas de personas cada año.
“Alrededor de 10 personas han muerto hoy”, declaró a la prensa el jefe de la policía de Orebro, Roberto Eid Forest, quien añadió que la policía “no podía ser más específica sobre el número debido a la gran cantidad de heridos”.
No dio detalles sobre el número de heridos. Dijo que la policía aún no conocía el móvil, pero que creía que el autor de los disparos había actuado solo.
La policía no reveló ninguna información sobre la identidad o la edad de los fallecidos, ni si eran alumnos o profesores de la escuela.
Varios medios de comunicación informaron de que el presunto autor de los disparos se apuntó a sí mismo, pero la policía no quiso confirmar esas informaciones.
El tiroteo tuvo lugar en Orebro, a unos 200 km al oeste de Estocolmo, en la escuela Risbergska para adultos que no completaron su educación formal o no obtuvieron las calificaciones necesarias para continuar estudios superiores. Está situada en un campus que también alberga escuelas para niños. El incidente se registró después de que muchos alumnos se habían ido a casa tras un examen nacional.
Dos profesores del Campus Risbergska, Miriam Jarlevall y Patrik Soderman, declararon al diario Dagens Nyheter que oyeron disparos en un pasillo.
“Los estudiantes vinieron y dijeron que alguien estaba disparando. Luego oímos más disparos en el pasillo. No salimos, nos escondimos en nuestros despachos”, dijeron.
“Hubo muchos disparos al principio, luego hubo silencio durante media hora y después empezó otra vez. Estábamos tumbados bajo nuestros escritorios, encogidos”.
Con información de Infobae
Foto: EFE