– En el grupo viajan hasta adultos mayores, que huyen de la violencia países como Honduras o Nicaragua –
En la madrugada del jueves 9 de enero, un grupo de al menos 200 migrantes partió en caravana desde Tapachula, Chiapas, con la esperanza de salir de la frontera sur y avanzar hacia el centro de México.
Entrevistada por N+, Yaumara Méndez, migrante cubana, expresó su deseo de alcanzar “el destino de la libertad”. Portando mochilas y con la esperanza como único equipaje, los migrantes se reunieron en el parque Bicentenario de Tapachula antes de iniciar su largo recorrido, el primero para muchos de ellos.
Carlos Solís, originario de Nicaragua, compartió que su intención es encontrar trabajo en la Ciudad de México, ya que en Tapachula no ha sido posible. “No tenemos un permiso, el proceso tarda de seis a ocho meses”, lamentó.
El grupo avanzó los primeros seis kilómetros hasta llegar al retén migratorio a las afueras de la ciudad, donde personal del Instituto Nacional de Migración (INM) les exhortó a detenerse para evitar riesgos en el camino. Sin embargo, los migrantes decidieron continuar.
En la caravana también viajan personas vulnerables, como Nery, un hondureño de 65 años que huye de la violencia y las amenazas de muerte por parte de pandillas en su país. “Quiero llegar a Estados Unidos, allá está mi esperanza de vida”, afirmó.
La primera jornada concluyó tras recorrer 16 kilómetros hasta llegar a Huehuetán, donde los migrantes descansaron antes de continuar su travesía al anochecer.
Durante el recorrido, agentes de la Guardia Nacional brindaron acompañamiento, resguardando al grupo en su difícil camino hacia una nueva oportunidad de vida. (Foto: Edgar H. Clemente)